De que si estuviera en otro lado me sentiría mejor, haría las cosas que quisiera hacer en vez de estar en mi trabajo. Tengo algo en la panza, además de mucha hinchazón. Y mido el “mucho” no con el tamaño sino con el esfuerzo que hago constantemente por esconderla. Y pienso en las salidas que tengo y pienso que lo que vengo haciendo es mucho más fácil. Y me enojo. Me pregunto si como soy en mi trabajo soy realmente; si estoy actuando demasiado. Angustia en la panza. Será hormonal? Será el tiempo? Será el cansancio? Que será? Por dios! Sabés que últimamente ni ganas de tomarme mi descanso de 15 min me dan. Me atraganto al comer, apurada, desesperada, hastiada. Y me enojo con la gente, ando enojada y no me jodan. Y con Emanuel me enojo a diario, por pavadas. Noto la negatividad de todos y me molesta. De repente me veo extraña entre esta gente y quiero escaparme. Es como que me dan ganas de sacarme el uniforme y ser yo. El uniforme es tan simbólico, no me había dado cuenta. Llego a casa y me cambio como si me sacara algo de encima. Y pensar que era algo que me agradaba tanto cuando empecé a trabajar, me sentía incluida en algo. Y ahora me atrapa, porque estoy mas gorda y porque desde siempre fue una ropa que odie (las camisas y los jeans) y ahora debo usarla y no tengo opción. Gata flora. Contrariada. Con ganas de volver a cero y quedarme un ratito. Es bueno ver a mis compañeros con sus propias ropas. Se ven todos más lindos. El uniforme te neutraliza, te hace uno más. En fin. Me lleva el diablo estos días…
2 Responses
  1. Bea Says:

    eyyyyy!!! despertateeeee!!! dónde está mi hermana??!?! Si no te gusta ahí hacés tu bolsita y te vas silbando bajito. El enojo se va a ir cuando te des más bola. Te quiero.


  2. Astrid Says:

    el dilema es que me gusta mi trabajo!! me gusta la gente con la que trabajo! pero me quita taaaanto tiempo!! eso me esta matando... nada mas... el no poder organizarme y dejar unas horas para mi... que se yo!


Publicar un comentario

Sobre el trabajo luego de un tiempo

| |


De que si estuviera en otro lado me sentiría mejor, haría las cosas que quisiera hacer en vez de estar en mi trabajo. Tengo algo en la panza, además de mucha hinchazón. Y mido el “mucho” no con el tamaño sino con el esfuerzo que hago constantemente por esconderla. Y pienso en las salidas que tengo y pienso que lo que vengo haciendo es mucho más fácil. Y me enojo. Me pregunto si como soy en mi trabajo soy realmente; si estoy actuando demasiado. Angustia en la panza. Será hormonal? Será el tiempo? Será el cansancio? Que será? Por dios! Sabés que últimamente ni ganas de tomarme mi descanso de 15 min me dan. Me atraganto al comer, apurada, desesperada, hastiada. Y me enojo con la gente, ando enojada y no me jodan. Y con Emanuel me enojo a diario, por pavadas. Noto la negatividad de todos y me molesta. De repente me veo extraña entre esta gente y quiero escaparme. Es como que me dan ganas de sacarme el uniforme y ser yo. El uniforme es tan simbólico, no me había dado cuenta. Llego a casa y me cambio como si me sacara algo de encima. Y pensar que era algo que me agradaba tanto cuando empecé a trabajar, me sentía incluida en algo. Y ahora me atrapa, porque estoy mas gorda y porque desde siempre fue una ropa que odie (las camisas y los jeans) y ahora debo usarla y no tengo opción. Gata flora. Contrariada. Con ganas de volver a cero y quedarme un ratito. Es bueno ver a mis compañeros con sus propias ropas. Se ven todos más lindos. El uniforme te neutraliza, te hace uno más. En fin. Me lleva el diablo estos días…

2 comentarios:

Bea dijo...

eyyyyy!!! despertateeeee!!! dónde está mi hermana??!?! Si no te gusta ahí hacés tu bolsita y te vas silbando bajito. El enojo se va a ir cuando te des más bola. Te quiero.

Astrid dijo...

el dilema es que me gusta mi trabajo!! me gusta la gente con la que trabajo! pero me quita taaaanto tiempo!! eso me esta matando... nada mas... el no poder organizarme y dejar unas horas para mi... que se yo!

Publicar un comentario